La primera presentación enfocó el tema preguntando ¿por qué hay tan elevado descarte de vacas en la lechería santafesina?

La referencia tiene que ver con el descarte voluntario, aquel que tiene que ver con la baja de ejemplares por problemas reproductivos o por razones de mejoramiento genético.

Se visitaron 77 tambos, la mayoría de ellos en los departamentos castellanos y Las Colonias, 29% de ellos de esquema confinado y 71% de base pastoril, con un total de 21.600 vacas. Los de base pastoril son tambos pequeños, de entre 100 y 200 vacas, mientras que los de plantel confinado, muchos de ellos con 500 o más vacas en producción.

Son explotaciones con parámetros de niveles medio en producción en litros y calidad de leche.

Se observa en el gráfico que el descarte es mayor en los esquemas confinados, un 13% más. Si se discrimina por causas, la mortalidad es comparable pero en los descartes por ventas son sensiblemente superior las bajas en sistemas de confinamiento.

En este cuadro se pueden apreciar las causas de descarte. La principal causa es por problemas reproductivos y luego los problemas mamarios y podales. Ahora si las dividimos por sistema productivo se encuentran las diferencias en los problemas podales, mucho mayor en esquemas confinados. Esto se debe, quizás, a los pisos, al alojamiento o problemas metabólicos.

En los sistemas pastoriles tienen un mayor peso las enfermedades infecciosas, que se muestran más controlados en los sistemas confinados.

Causa de mortalidad
Por causas involuntarias, las causas traumáticas son las principales y luego las infecciosas. Ahora, si vemos las diferencias por sistema productivo veremos que en enfermedades traumáticas, intoxicaciones y mastitis los sistemas confinados tienen mayor peso.

En los sistemas pastoriles, puede haber en determinada etapa de la vaca (lactancia, por ejemplo), donde el pasto no sea suficiente para ese ejemplar y esto pueda derivar en problemas metabólicos. Esto, en los sistemas confinados está más ajustado y controlado y por lo tanto este potencial problema se reduce.

La vida productiva y el modelo
En la siguiente placa se puede advertir el comportamiento productivo de las vacas en los sistemas pastoriles y de confinamiento.

Se aprecia una sensible diferencia de servicio de las vacas en los dos sistemas y el expositor se pregunta si esto es inherente al modelo productivo o bien en el modelo pastoril se deja extender el ciclo.

Los factores de riesgo asociados al descarte encontrados fueron estos, sumados a las bajas por reducción en el promedio de litros de leche por vaca. Al aumentar el promedio, hay tendencia a descartar mayor.

También está asociado a la eficiencia reproductiva y otros dos factores importantes son: las condiciones de los corrales de preparto y otra es la rutina de ordeñe, manifestándose menor el descarte en los protocolos de ordeñe más ajustados.

Este gráfico de riesgo da pistas sobre donde poner el acento para corregir estos registros.

En este punto surge una pregunta: ¿Cómo es la relación entre las vaquillonas que se reponen y las que se descartan? Este interrogante busca saber si el tambo está generando la cantidad de vacas para reponer.

En este punto hay una preocupación adicional a la tasa de descarte y tiene que ver con el promedio de mortalidad de terneros, que según estudios en tambos santafesinos alcanza el 10,5%. Eso, sumado a la mortandad en preparto y otras, alcanza un registro de entre el 15 y 18%.

Según datos compartidos en la charla, solo la mitad de los tambos santafesinos alcanza a producir la cantidad de vaquillonas que necesita reponer. A partir de ello se puede suponer que el precio de la vaquillona seguirá siendo alta.